DAMASCO.- El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció que cerca de 28.000 niños y niñas de 60 países permanecen atrapados en el noreste de Siria, la mayoría de ellos en campos de desplazados, a causa de la escalada de la violencia tras la ofensiva de Turquía en esa zona el pasado mes de octubre.
La información se desprende de una declaración de la directora ejecutiva de Unicef, Henrietta Fore.
“Según nuestros cálculos, unos 28.000 Nilos de más de 60 países se quedan en una trampa en el noreste de Siria, en particular en campamentos de desplazados, casi 20.000 de los son niños de Irak”, dijo Fore. Agregó que más del 80% de los niños tienen 12 años o menos.
Según Fore, al menos 250 niños algunos de ellos tienen nueve años, se encuentran detenidos. “Todos ellos viven en condiciones no adecuadas para los niños”, indicó.
Unicef llamó de nuevo al Gobierno sirio a garantizar una reintegración segura de los niños sirios en sus comunidades locales. Además, la organización internacional pidió a los Gobiernos de otros países que garanticen un retorno seguro, digno y voluntario de los niños extranjeros a sus países de origen.
El incremento de la violencia en el noreste de Siria supone “una nueva urgencia para que los gobiernos repatríen a lo niños extranjeros varados en la zona antes de que sea demasiado tarde”, señala el comunicado de Fore.