BAGDAD.- Al menos cuatro cohetes golpearon este domingo de madrugada la base iraquí que aloja tropas de Estados Unidos, situada cerca del complejo de la embajada estadounidense en la zona verde en Bagdad, sin dejar bajas y causando solo daños menores, según representantes estadounidenses.
Las explosiones activaron las sirenas de advertencia en todo el complejo diplomático, pero se desconoce qué áreas fueron afectadas.
No obstante, tres fuentes iraquíes de seguridad dijeron que dos de los proyectiles habían caído en el complejo de la embajada estadounidense y un tercero golpeó la base de la coalición. Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a dar declaraciones a los medios.
sLas bases en Iraq donde hay tropas estadounidenses han sufrido una serie de ataques con cohetes y morteros. Un proyectil explotó este jueves en la base aérea K1 en la provincia de Kirkuk, en el norte de Iraq. No hubo víctimas, según funcionarios de seguridad.
Docenas de militares americanos resultaron heridos el 8 de enero en un ataque iraní de misiles contra la base aérea de Ain Al-Asad. La operación era una represalia por un ataque de dron estadounidense en Bagdad que mató el 3 de enero al general más poderoso de Irán, Qassem Soleimani.
Las facciones rebeldes han prometido venganza por la muerte de Soleimani e insistieron en que las tropas estadounidenses deberán abandonar Iraq.
Entretanto, miles de partidarios de Moqtada Sadr salieron a la calle el viernes y nuevamente el sábado en la capital iraquí para denunciar “ataques a los símbolos religiosos”.
“Somos un solo clan y nuestro jefe es Moqtada Sadr”, gritaba la multitud de hombres, algunos vestidos con trajes tradicionales, que invadió la plaza Tahrir de Bagdad en medio de manifestaciones contra el gobierno.
Alrededor de 500 personas han muerto desde que el movimiento antigubernamental estalló en octubre y unas 30.000 más han resultado heridas, la gran mayoría de ellas jóvenes manifestantes.