BRUSELAS.— La Unión Europea está preparada para todos los escenarios posibles en sus negociaciones comerciales con Estados Unidos, incluido un eventual colapso del diálogo, declaró Ursula von der Leyen tras debatir las últimas propuestas de la Casa Blanca de Trump con los líderes del bloque.
La presidenta de la Comisión Europea afirmó en una conferencia de prensa en la madrugada del viernes que su equipo aún está evaluando la oferta más reciente de Washington sobre aranceles.
“Estamos listos para alcanzar un acuerdo. Al mismo tiempo, nos preparamos para la posibilidad de que no se logre uno satisfactorio”, dijo. “En resumen, todas las opciones siguen sobre la mesa.”
La gran duda que persiste entre los líderes del bloque y la Comisión —que es la encargada de gestionar la política comercial europea— es si aceptar un acuerdo asimétrico con Estados Unidos o contraatacar, arriesgando una escalada y la furia del presidente estadounidense.
Durante la cumbre en Bruselas que comenzó el jueves, varios Estados miembros se manifestaron en contra de aplicar represalias. La mayoría sostuvo que es preferible cerrar un acuerdo rápido con EE.UU., aunque no sea perfecto, incluso si eso implica mantener muchos de los aranceles impuestos por Trump, según dos fuentes al tanto de las conversaciones.
La UE necesita alcanzar un entendimiento con Washington antes del 9 de julio, fecha en la que entrarán en vigor aranceles del 50% sobre casi todas las exportaciones del bloque a EE.UU. Trump alega que el superávit comercial de la UE y las presuntas barreras al comercio estadounidense perjudican a su país.
El canciller alemán Friedrich Merz enfatizó ante sus colegas en Bruselas la urgencia de alcanzar una solución para disipar las amenazas que se ciernen sobre sectores clave.
“Nos quedan menos de dos semanas”, advirtió. “No se puede acordar un tratado comercial complejo en tan poco tiempo.”
Francia, sin embargo, rechaza la idea de aceptar un acuerdo inclinado a favor de EE.UU. y exige la eliminación total de los aranceles, afirmó otro funcionario. El presidente Emmanuel Macron declaró tras la cumbre que un acuerdo rápido es deseable, pero solo si es “equilibrado”.
“El mejor acuerdo tarifario con EE.UU. sería de cero a cero”, afirmó Macron, advirtiendo que si Washington mantiene aranceles del 10%, el bloque deberá responder. “De lo contrario, seríamos ingenuos, o débiles, o ambas cosas. Y no somos ninguna.”
Las discusiones con EE.UU. abarcan tanto los aranceles como barreras no arancelarias, sectores clave, compras estratégicas y cuestiones regulatorias que la UE busca abordar mediante su agenda de simplificación, dijeron las fuentes bajo condición de anonimato.
Según informó Bloomberg, Washington exige concesiones que los funcionarios europeos consideran unilaterales y desequilibradas. Las conversaciones han sido especialmente arduas en sectores como acero y aluminio, automóviles, farmacéutica, semiconductores y aviación civil.
Pese a todo, los funcionarios europeos creen que el mejor escenario posible sería acordar principios generales que permitan extender las negociaciones más allá del plazo de julio.
Además del arancel universal del 10% —actualmente impugnado en la justicia estadounidense— Trump ha aplicado aranceles del 25% a los autos y hasta del 50% al acero y al aluminio, amparado en otra autoridad ejecutiva. También trabaja para extender los aranceles a sectores como el farmacéutico, los semiconductores y la aviación comercial.
Muchas de estas medidas se mantendrían vigentes incluso si se logra un acuerdo, indicaron las fuentes. La UE, que busca un acuerdo mutuamente beneficioso, evaluará el resultado final y decidirá entonces qué nivel de asimetría —si alguno— está dispuesta a aceptar.
El comisario europeo de Industria, Stéphane Séjourné, declaró a Bloomberg esta semana que la UE deberá responder ante cualquier arancel, incluido el del 10%, con contramedidas. Sin embargo, algunos líderes, como la primera ministra italiana Giorgia Meloni, han sugerido que podrían aceptar ciertos gravámenes si eso permite cerrar un acuerdo rápido y evitar una escalada del conflicto.
Durante la cumbre en Bruselas, el bloque también abordó sus relaciones comerciales más amplias. Macron y Merz señalaron que los líderes europeos acordaron en principio avanzar hacia la firma del postergado acuerdo de libre comercio con el bloque sudamericano Mercosur, al que Francia se había opuesto.
El líder alemán también elogió la propuesta de Von der Leyen de crear una nueva organización internacional de comercio que reemplace a la “disfuncional” Organización Mundial del Comercio. Según una fuente con conocimiento del tema, la presidenta de la Comisión había planteado esta idea por primera vez durante la cumbre del G7 en Canadá a comienzos de este mes.

