Washington presiona a Riad por crisis regional

0
125

WASHINGTON.- Estados Unidos insta a Arabia Saudita para que restablezca las relaciones con Catar, mientras el reino está bajo un creciente escrutinio internacional por su papel en el asesinato del periodista Jamal Khashoggi.

El objetivo de Washington apunta a resolver el aislamiento político y económico que lleva más de un año impuesto a Catar por Arabia Saudita y otros tres estados árabes, informó Bloomberg el lunes, citando a tres fuentes anónimas que están familiarizadas con los esfuerzos de Estados Unidos.

Arabia Saudita, Baréin, Egipto y Emiratos Árabes Unidos rompieron los lazos políticos y económicos con Catar en junio de 2017, imponiendo un embargo de tierra, mar y aire al pequeño estado del Golfo, que alberga una importante base aérea de Estados Unidos. El cuarteto acusó a Doha de «apoyar el terrorismo», un cargo que éste niega con vehemencia.

La semana pasada, el príncipe heredero de la corona saudí Mohammed bin Salman elogió la economía de Catar en un raro comentario conciliatorio sobre el estado del Golfo.

Bin Salman está bajo una fuerte presión sobre su posible papel en el asesinato de Khashoggi en el consulado de Arabia Saudita en Estambul el 2 de octubre.

Los analistas han sugerido que las continuas consecuencias sobre el caso, que han atraído a los medios internacionales y un intenso escrutinio político, pueden llevar a Arabia Saudita a ser presionada para que cambie de rumbo en varias áreas de política exterior, incluido el bloqueo a Doha.

Según una de las fuentes contactadas por Bloomberg, el gobierno de Donald Trump también está presionando para que los funcionarios saudíes resuelvan la guerra en curso en Yemen, un conflicto que ha provocado la peor crisis humanitaria del mundo.

El conflicto en Yemen, el país más pobre del mundo árabe, comenzó con la toma de la capital en 2014, Sanaa, por los rebeldes hutíes, quienes derrocaron al gobierno internacionalmente reconocido del presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi. Una coalición de Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos aliada con el gobierno ha estado luchando contra los hutíes desde 2015.