ANKARA.- Turquía está inquieta por los planes de Estados Unidos para establecer «puestos de observación» en Siria a lo largo de partes de su frontera con Turquía, dijo el sábado el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar.
El secretario de Defensa, Jim Mattis, dijo el miércoles que Estados Unidos estaba creando los puestos para ayudar a mantener el enfoque de despejar los últimos bastiones de militantes de Estado Islámico en Siria. Pero Akar sostiene que que la creación de los puestos tendría un impacto muy negativo en las percepciones de Estados Unidos en Turquía.
«Creo que acciones como esta harán que la difícil situación en la región sea aún más complicada», dijo el ministro. «Nadie debería dudar de que las fuerzas armadas turcas y la República de Turquía tomarán las medidas necesarias contra todo tipo de riesgos y amenazas a través de sus fronteras», agregó. «Esperamos que nuestros aliados de Estados Unidos corten de inmediato sus lazos con el terrorista YPG, que no es en lo más mínimo diferente del PKK», dijo además Akar.
Ankara no concibe el apoyo de Estados Unidos a la milicia YPG kurdo siria, que ve como una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), que libra una insurgencia de décadas en el territorio turco. Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea designan al PKK como un grupo terrorista. Por su parte, Washington se ha quejado durante mucho tiempo de que la tensión entre Turquía y las Fuerzas Democráticas de Siria, que incluyen al YPG, a veces ha frenado el progreso en la lucha contra ISIS.
Estado Islámico todavía está presente en el este de Siria, en un sector al este del río Éufrates, cerca de la frontera con Irak. La administración del presidente Donald Trump espera que la lucha apoyada por Estados Unidos contra el Estado Islámico en su última posición en el noreste de Siria termine en unos meses. Pero un importante diplomático estadounidense dijo recientemente que las fuerzas estadounidenses permanecerán para garantizar la «derrota duradera» del grupo militante.