ATENAS.- Un nuevo ataque xenófobo se ejecutó en Grecia. Un grupo de ciudadanos de la localidad de Vilia, al norte de Atenas, atacaron a 90 refugiados que habían llegado a un hotel ese mismo día. Entre el los atacantes estaba la alcaldesa del municipio, Ioanna Kriekouki.
«Aparecieron frente al hotel Verori y lo atacaron. Entraron y empezaron a romper puertas y ventanas. Atacaron a varios refugiados de Palestina y Siria. Golpearon a un anciano y a sus dos hijos», comentó uno de los refugiados a la agencia de noticias Euronews.
Otro afectado, de origen sirio, explicó que ahora la mayoría de los refugiados tienen miedo y no quieren salir del hotel, ni siquiera para comprar comida. En los videos que testifican los hechos se observó que los manifestantes lanzaron piedras contra el edificio.
Además de la alcaldesa también se detectó la identidad de otro muchacho quien es dueño de un bar en la zona. El sujeto reconoció los hechos pero se defendió al sostener que «perdieron el control y fue algo realmente estúpido».
«Comenzamos nuestra reunión pacíficamente, no somos terroristas. Queríamos saber quiénes eran, de dónde venían. Éramos unas 70 personas. De repente, 10 de nosotros perdimos los estribos y atacamos a los refugiados. Fue algo realmente estúpido. Perdimos el control de la situación», justificó el responsable.