BOGOTÁ.- El polémico proyecto fue uno de los tantos motivos por los que el paro nacional se extendió hasta el día de hoy. Los congresistas decidieron archivar la propuesta con 16 votos a favor y tres en contra.
El proyecto, apoyado por el Gobierno de Iván Duque, era considerado una normativa privatizadora de los servicios públicos de la sanidad, y ahora al igual que su siamesa, la reforma fiscal, pasó a la historia.
Desde el pasado 28 de abril mediante arengas, carteles y hasta expresiones artísticas en todo el país los ciudadanos y muchos de los funcionarios de la salud pedían que la reforma propuesta por el partido Cambio Radical y apoyada por el oficialismo sea retirada, al considerarla perjudicial tanto para usuarios como profesionales.
Con el proyecto, se continuaría la privatización del sistema de salud, crearía conglomerados empresariales, liquidaría los hospitales públicos, traería mecanismo de negación de servicios y tratamientos, de acuerdo con denuncias hechas por los mismos empleados sanitarios.
Además, entregaría al Ministerio de Hacienda, la decisión de financiar o no los tratamientos, arremete contra la autonomía universitaria, afectando la formación continua de los médicos generales, además de cambiar el currículo de medicina familiar en detrimento de la calidad.
En el contexto del paro nacional esta es la segunda orquesta de ley de carácter privatizador que fracasa bajo el mando de Duque, ante el reclamo popular.
Cabe recordar la que las protestas y el descontento social se desencadenó por la reforma tributaria y continúan hasta el día de hoy.