LONDRES.- Una diputada del Partido Laborista y otras tres del Partido Conservador renunciaron a sus cargos dentro de las agrupaciones por diferencias a la hora de abordar el Brexit, informó la agencia de noticias Europapress. Estas cinco dimisiones se suman a las siete que sufrieron los laboristas el lunes.
En el caso del partido oficialista fueron Heidi Allen, Anna Soubry y Sarah Wollaston las tres mujeres en renunciar porque consideran que el partido se volcó a la derecha y sumado a «la desastrosa gestión del Brexit» lo mejor era retirarse de él.
«Nosotras no hemos cambiado, sí lo ha hecho el Partido Conservador, que ya no refleja los valores y creencias que compartimos con millones de personas de todo Reino Unido», denunciaron. A su criterio, el divorcio está lejos de construir un consenso nacional y lamentablemente la agrupación lleva al país a un salto al vacío, ya que abandonarán la Unión Europea en un mes y sin acuerdo.
En paralelo, durante la jornada de este miércoles la diputada laborista, Joan Ryan, también anunció su renuncia por discrepancias con el líder del partido, Jeremy Corbyn. A su criterio el actual Partido Laborista es muy diferente al que se unió hace 40 años atrás, algo que no puede tolerar. Incluso, se animó a denunciar que Corbyn «infectó con el flagelo de antisemitismo» a toda la agrupación.
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«Ha sido el mayor honor de mi vida representar a las personas de Enfield Northe. Continuaré representándoles y hablando por ellos como miembro del Grupo Independiente de diputados», lanzó al dar la noticia.
Las cuatro mujeres no abandonarán su carrera política sino que se unirán la agrupación independiente formada por los siete ex laboristas que renunciaron el lunes.
Las reacciones de May y Corbyn
Los líderes de ambas agrupaciones se refirieron de inmediato a los hechos. El laborista afirmó estar decepcionado al saber que diputados consideran que no pueden continuar con el trabajo en equipo por las políticas laboristas que inspiraron a millones de personas. A la vez agregó que su plan alternativo al Brexit es el ideal para cerrar el divorcio ya que el alcanzado por la primera ministra, Theresa May, es inaceptable.
La primera ministra, por su parte, admitió la grieta que generó el divorcio entre los miembros del partido pero insistió en que cumplir el compromiso de salida es lo mejor para el país. Previo a esto lamentó la decisión de sus compañeras.
