MOSCÚ.- El asesor del presidente de Rusia para asuntos internacionales, Yuri Ushakov, aseguró que la próxima cumbre entre Joe Biden y Vladímir Putin podría derivar en la vuelta de los respectivos embajadores, que permanecen en Moscú y Washington, a sus legaciones diplomáticas.
“Ahora da la impresión que los embajadores están equivocados de lugar. La intención es que al término de la cumbre, si lo acuerdan los presidente, vuelvan a donde deben trabajar. Si los presidentes toman esa decisión, los embajadores podrían regresar a las capitales nada más finalizando el evento en Ginebra”, dijo Ushakov.
“Hemos quedado en que los dos embajadores formarán parte de las delegaciones (en Ginebra), lo cual me parece una señal de que luego pasarán a trabajar a otro sitio”, dijo el asesor.
Anatoli Antónov, embajador ruso en Washington, llegó a Moscú el 21 de marzo pasado, cuatro días después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, respondiera en una entrevista afirmativamente a la pregunta de si “cree que Putin es un asesino”, y amenazó al presidente ruso con hacer pagar por una supuesta injerencia de Moscú en las elecciones estadounidenses de noviembre de 2020.
El pasado 15 de abril, Biden impuso sanciones a 32 entidades e individuos de Rusia y expulsó a 10 funcionarios de la misión diplomática del Kremlin.
Con esas medidas Washington pretendía castigar a Rusia por su supuesto papel en el ciberataque contra el proveedor de programas informáticas SolarWinds y la interferencia en las elecciones presidenciales de 2020, así como por haber ofrecido presuntamente recompensas a los insurgentes en Afganistán por asesinar militares norteamericanos, acusaciones todas que Rusia rechaza y considera ilógicas.
La respuesta de Rusia no se hizo espera y expulsó a 10 empleados de la legación estadounidense de Moscú, impuso sanciones a ocho altos cargos y recomendó, en un caso sin precedentes en la práctica diplomática, que el embajador John Sullivan viajara para consultar a Washington.
Asimismo, Moscú espera que la reunión de este 16 de junio entre Putin y Biden impulse las negociaciones sobre la reducción de las armas estratégicas, declaró el vicecanciller ruso Serguéi Riabkov en una entrevista con el periódico Izvestia.
El vicecanciller subrayó que es “necesario limitar armas y fortalecer la estabilidad estratégica en vez de incrementar armas” para reforzar la seguridad.
En febrero, Rusia y Estados Unidos acordaron extender el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START) por cinco sos mas sin renegociar ninguno de sus términos.
El START III, que vence ahora el 5 de febrero de 2026, es actualmente el único acuerdo entre Rusia y Estados Unidos, después de que Washington rompiera definitivamente, el 2 de agosto de 2019, el Tratado INF de misiles de medio y corto alcance.