DOHA.- Catar ha rechazado los comentarios hechos por el secretario general del Consejo Nacional de Turismo en referencia a los egipcios que buscan ingresar al país en medio de una ruptura política en curso.
En una declaración el domingo, la Oficina de Comunicaciones del Gobierno de Catar dijo que el país no dejaría de emitir visas, y agregó que «las poblaciones no deberían estar involucradas en disputas entre estados».
El domingo, en un evento para promover una campaña de turismo de verano, Akbar al-Baker, también CEO de Qatar Airways, había afirmado que el país no permitiría que los egipcios ingresaran para participar en promociones dirigidas a impulsar su industria turística.
«La visa no estará abierta para nuestros enemigos, estará abierta para nuestros amigos», había comentado al-Baker. «¿Están abiertas las visas para que vayamos allí? No. Entonces, ¿por qué deberíamos abrirlas para ellos? Todo es recíproco», había agregado.
Los comentarios fueron los primeros hechos por un funcionario de Catar desde que la ruptura de casi dos años comenzó a sugerir que Doha ya no otorgaría visas a personas de Egipto, el país árabe más poblado.
Sin embargo, la oficina de comunicaciones del gobierno dijo en un comunicado que solo el Ministerio del Interior y su Departamento de Asuntos de Expatriados estaban autorizados para emitir visas de entrada al país. «Cualquier declaración fuera de este marco legal no representa las políticas de trabajo del Ministerio del Interior», aseguró la declaración.
La oficina de comunicación también aseguró que «Catar da la bienvenida a todos los pueblos del mundo, y que las diferentes actividades entre los pueblos, ya sean culturales, económicas, deportivas y de turismo, entre otras, son algunas de las formas en que se puede unir a las naciones, independientemente de las disputas entre los estados».
Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Egipto cortaron los lazos diplomáticos y comerciales con Catar en 2017, acusándolo de apoyar el «terrorismo». Doha niega el alegato.
Mientras que los ciudadanos de los tres estados del Golfo fueron llamados a sus países de origen debido a la ruptura, los egipcios, que constituyen la minoría árabe más grande en Catar, han permanecido y constituyen una parte considerable de la fuerza laboral del pequeño pero rico país.
Catar tiene una población de 2,7 millones, pero solo unos 300.000 son ciudadanos nacionales. Un informe de 2017 realizado por una consultora privada estimó a los habitantes egipcios en 200.000.