WASHINGTON.—Estados Unidos anunció que ha presentado cargos contra cuatro empresas químicas con sede en China y ocho ciudadanos de ese país por el tráfico de precursores utilizados para fabricar fentanilo, una droga que causa la muerte de aproximadamente 200 personas al día en el país norteamericano.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, informó en una conferencia de prensa que en tres acusaciones separadas se imputó, por primera vez, a empresas químicas chinas por suministrar la materia prima para la fabricación de la droga a carteles mexicanos como el de Sinaloa y el de Jalisco.
«Estas empresas y sus empleados conspiraron a sabiendas para fabricar fentanilo letal y distribuirlo en Estados Unidos«, afirmó Garland.
Una de estas empresas químicas con sede en China envió más de 200 kilogramos de precursores químicos a Estados Unidos con el objetivo de producir 50 kg de fentanilo, cantidad que «podría contener suficientes dosis mortales para acabar con la vida de 25 millones de estadounidenses», aseguró.
Este opioide sintético es hasta 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más potente que la morfina.
También se presentaron cargos contra el ejecutivo principal de esa empresa y dos de sus empleados por su participación en la conspiración internacional de tráfico de fentanilo. Dos de ellos se encuentran bajo custodia.
«Los acusados anunciaban abiertamente la venta de precursores de fentanilo en línea e intentaron evadir la detección de las fuerzas del orden mediante el uso de envases engañosos», dijo Garland sobre la operación en la que participaron agentes encubiertos de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
Garland detalló que en los últimos ocho meses, los acusados enviaron los 200 kilos de precursores químicos sin saber que los presuntos traficantes con los que trataban eran en realidad fuentes confidenciales de la DEA.
«Cada una de estas empresas también suministra precursores químicos a Estados Unidos y México, entre otros lugares, sabiendo que se utilizarán para producir fentanilo u otras sustancias», insistió.
«Estas tres empresas promocionan abiertamente sus productos en todo el mundo y garantizan que los productos que envían a Estados Unidos y México no serán detectados ni interceptados. Además, emplean prácticas engañosas y fraudulentas, como el etiquetado incorrecto de los paquetes y la presentación de declaraciones falsas en los pasos fronterizos», explicó.
En 2022, según el fiscal, la DEA y otras autoridades incautaron más de 50.6 millones de píldoras recetadas falsas mezcladas con fentanilo, más del doble de la cantidad incautada en 2021. También se confiscaron 10,000 libras de polvo de fentanilo (453 kilos).