MANAGUA.- Por segunda vez en 24 horas, una protesta cívica fue atacada ayer por elementos armados en la capital de Nicaragua, como parte de un violento fin de semana que dejó dos muertos, varios heridos y una veintena de detenciones ilegales, según organismos de derechos humanos.
La llamada Marcha de las flores para honrar a los niños que habían sido asesinados por la violencia que desangra al país centroamericano desde el 18 de abril, fue teñida con sangre, cuando encapuchados abrieron una lluvia de balas contra la multitud que dejó un muerto y al menos nueve heridos. El fallecido es Luis Manuel Ortíz de 23 años. Uno de los heridos esta en estado grave en un hospital de la capital.
En Managua, un manifestante resultó herido ayer durante un ataque ejecutado por sujetos desconocidos contra una caravana opositora que recorría la ciudad, informaron testigos a la prensa, quienes también señalaron que el ataque fue perpetrado por simpatizantes del gobierno sandinista.
La violenta crisis sociopolítica que ha dejado cerca de 300 muertos en Nicaragua se debe a que se han “desatado fuerzas tenebrosas que siembran el terror y la muerte” en el país, denunció el obispo nicaragüense Silvio Báez. Por otro lado, la vicepresidenta y esposa del señalado presidente Daniel Ortega ha atribuido la crisis a una invasión de «espíritus malignos”.
Desde el vaticano el papa Francisco llamó de nuevo al Gobierno y los otros sectores a un dialogo de carácter “urgente” y sincero para darle fin al caos que atraviesa la nación centroamericana. Sin embargo, los obispos denuncian la negativa del Ejecutivo a la una salida pacifica.