PARÍS.— Las reglas que exigen en Francia el certificado de vacunación contra el COVID-19 y llevar tapabocas en espacios cerrados serán eliminadas a partir del 14 de marzo, confirmó el primer ministro, Jean Castex.
En Francia, “la situación sanitaria está mejorando”, razón por la que el Gobierno francés dejará de exigir el pase de vacunación, explicó Castex.
Sin embargo, el certificado sobre la pauta completa de vacunación seguirá siendo obligatorio para acceder a los centros de atención domiciliaria para personas mayores.
Por otra parte, no será obligatorio utilizar mascarillas en interiores, salvo algunas excepciones. “Se mantendrá la obligatoriedad del uso de mascarilla en el transporte público de pasajeros y seguirá vigente el pase sanitario en los establecimientos de salud; residencias de naciones, establecimientos que acojan a personas discapacidad, así como la obligación de vacunación que se aplica para los cuidadores”, explicó Castex.
Las nuevas medidas comenzará a regir desde el próximo 14 de marzo, casi un mes antes de las elecciones presidenciales.
El ministro de Sanidad, Olivier Verán, había señalado en los últimos días que el país ahora cumple los criterios que permiten retirar estas restricciones impuestas por el Gobierno para tratar de frenar las tasas de contagios.
El funcionario explicó que para ello era necesario que el número de hospitalizaciones en cuidados intensivos por coronavirus bajara acreedor de los 1.500.
Además, la tasa de incidencia debe ubicarse entre 300 y 500 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días consecutivos y el factor de reproducción del virus R, que los científicos usan para describir la intensidad de una enfermedad contagiosa, tiene que ser inferior a 1.