NUEVA YORK.- Human Rights Watch instó a Arabia Saudita a que permita el acceso de observadores independientes a activistas detenidas, y agregó que no se puede confiar en las garantías de bienestar de Riad después del asesinato del periodista Jamal Khashoggi.
El reino rechazó el mes pasado como «falsos» e «infundados» los informes publicados por HRW y Amnistía Internacional de que tres activistas por los derechos de las mujeres habían sido torturadas y acosadas sexualmente durante su detención.
«Las constantes mentiras de Arabia Saudita sobre el papel de los funcionarios de alto rango en el asesinato de Jamal Khashoggi significan que las negaciones del gobierno de que torturó a estas mujeres activistas no son lo suficientemente buenas», dijo el jueves el subdirector de HRW para Medio Oriente, Michael Page, en una declaración.
El organismo de vigilancia con sede en Nueva York dijo que recibió un nuevo informe el 28 de noviembre de una «fuente informada», que indicaba que las autoridades saudíes habían torturado y acosado sexualmente a una cuarta activista de los derechos de las mujeres. La tortura incluyó descargas eléctricas y latigazos, aseguró el grupo en un comunicado.
Las fuentes dijeron a HRW que la tortura de los activistas sauditas «puede seguir en curso». «A menos que monitores independientes puedan confirmar el bienestar de las mujeres activistas, hay razones para creer que las autoridades sauditas las han tratado con una crueldad indescriptible», dijo Page.
La agencia de noticias Reuters, citando dos fuentes anónimas, informó el jueves que un importante asesor del Príncipe Mohammed bin Salam, Saud al-Qahtani, quien fue despedido por su papel en el asesinato de Khashoggi, supervisó personalmente la tortura de una de las activistas detenidas a principios de este año.
Las mujeres se encuentran entre más de una docena de activistas arrestadas en mayo, justo antes del levantamiento histórico de una prohibición de décadas contra las conductoras el mes siguiente. Continúan detenidas once mujeres, asegura el grupo, incluidas las cuatro presuntamente torturadas.