WASHINGTON.- La Prueba de Redirección de Asteroides Doble (DART) intentará demostrar la desviación de meteoritos por impacto cinético, una técnica que podría evitar que un peligroso asteroide choque contra la Tierra al cambiar el movimiento del astro en el espacio.
A pesar de la actual lucha de la humanidad contra la pandemia del coronavirus, todavía existen otras amenazas muy reales, como un posible ataque de asteroides a la Tierra, advierte el portal científico Phys.org. La NASA, por lo tanto, está desarrollando un potente motor de iones para su misión de defensa planetaria contra los asteroides.
La misión DART (DouBle Asteroid Redirection Test) se lanzará en julio de 2021 para demostrar la capacidad tecnológica de desviar un asteroide. Los investigadores buscan estudiar el uso del impacto cinético para cambiar la trayectoria de una roca espacial.
De esta forma, el Propulsor Xenón Evolutivo Comercial de la NASA (NEXT-C) se dirigirá al sistema de asteroides binarios Didymos, a 11 millones de kilómetros de la Tierra, el cual está compuesto por dos rocas espaciales: una de 780 metros y otra de 160.
Antes de eso, el propulsor desprenderá 6 cubesats, unos pequeños satélites proporcionados por la Agencia Espacial Italiana que reciben el nombre de LICIA y capturan imágenes de la colisión y enviarán los datos a la tierra.
Se calcula que el impacto moverá la velocidad orbital de Didymos B en medio milímetro por segundo, los suficientes para que los telescopios terrestres detecten con el tiempo un cambio en su período de rotación y el cual causará un cráter de unos 20 metros de diámetro.
Aunque DART será destruido cuando impacte, la ESA está planeando una misión de seguimiento. Se llama Hera, y esta programada para lanzarse en 2024, y llegar en 2027. Hera no solo investigará el efecto del impacto de DART, sino que llevará las herramientas para estudiar los asteroides binarios y su interior.