Los Trump son acusados de fraudes financieros

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WASHINGTON.— Un magistrado de Nueva York ha sentenciado que Donald Trump participó en prácticas fraudulentas durante varios años mientras construía el imperio inmobiliario que lo llevó a la fama y, finalmente, a la Casa Blanca.

El juez Arthur Engoron declaró a Trump y a dos de sus hijos responsables de prácticas financieras fraudulentas continuas relacionadas con la valoración de activos en la empresa familiar Trump Organization, poco antes del inicio del juicio civil que comienza el lunes.

La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, que presentó la denuncia, busca una multa de 250 millones de dólares y la prohibición para el expresidente, quien tiene la intención de buscar la presidencia nuevamente en las próximas elecciones, así como para sus hijos Donald Trump Jr. y Eric Trump, de ocupar cargos directivos en cualquier empresa.

James encontró pruebas de que el expresidente y su empresa engañaron a bancos, aseguradoras y otras entidades al sobrevalorar sus activos y exagerar su patrimonio neto, lo que les permitió cerrar acuerdos y obtener financiamiento.

El juez Engoron concluyó que Donald Trump y sus dos hijos, quienes son vicepresidentes ejecutivos de la Trump Organization, son «responsables» de violaciones continuas de la ley. Además, los documentos proporcionados por la fiscal general muestran de manera evidente las «evaluaciones fraudulentas» realizadas por Donald Trump sobre los activos del grupo, que opera en el sector inmobiliario residencial, hotelero y campos de golf.

La fiscal general del estado de Nueva York acusa al multimillonario republicano y a sus hijos de inflar su patrimonio en miles de millones de dólares para obtener préstamos bancarios favorables o reducir sus impuestos entre 2011 y 2021.

Engoron ordenó la revocación de algunas de las licencias comerciales de Trump como sanción, dificultándoles o incluso imposibilitándoles hacer negocios en Nueva York. En su decisión emitida el martes por la tarde, también incluyó a Allen Weisselberg y Jeffrey McConney, antiguos ejecutivos de la Organización Trump, y ordenó la «cancelación» de las licencias comerciales de todos en Nueva York. Otros seis delitos serán resueltos en el juicio programado para el 2 de octubre.