NIAMEY.— El domingo pasado, se llevó a cabo una masiva manifestación frente a la embajada de Francia en Niamey, la capital de Níger, en apoyo a los militares que protagonizaron el golpe de Estado que derrocó al presidente electo Mohamed Bazoum.
Durante la protesta, algunos manifestantes intentaron ingresar a la embajada, mientras otros arrancaron la placa con el nombre «Embajada de Francia en Níger» y la pisotearon, para luego reemplazarla con banderas rusas y nigerinas. En medio de los cánticos y consignas como «¡Viva Putin!», «¡Viva Rusia!» y «¡Abajo Francia!», la manifestación fue dispersada mediante el uso de gases lacrimógenos.
La junta militar, responsable del golpe, había prohibido la protesta que tuvo lugar cuatro días después del derrocamiento de Mohamed Bazoum, a cargo del general Abdourahamane Tiani, líder de la poderosa guardia presidencial, quien se autoproclamó como el nuevo dirigente del país.
La justificación del golpe fue la «degradación de la situación de seguridad» en Níger debido a la violencia de grupos yihadistas. El presidente derrocado lleva cuatro días detenido por los militares en el palacio presidencial.
La manifestación provocó una respuesta firme por parte del presidente de Francia, Emmanuel Macron, quien afirmó que no tolerará ningún ataque contra Francia y sus intereses. Adicionalmente, anunció que cualquier persona que ataque ciudadanos franceses, al ejército, a diplomáticos o a bases francesas se enfrentará a represalias inmediatas por parte de Francia. Cabe destacar que Francia tiene un contingente de 1.500 soldados en Níger.
En respuesta al golpe de Estado, Francia, al igual que la Unión Europea, suspendió la cooperación en materia de seguridad, así como la ayuda financiera y al desarrollo hacia Níger. Esta medida se tomó como una forma de condena y como una señal de la gravedad de la situación en la región.
Es importante destacar que esta versión ha sido modificada completamente y que en ningún caso refleja ni apoya las acciones violentas o destrucción de bienes durante una protesta. Las manifestaciones deben llevarse a cabo de manera pacífica y respetuosa para que se puedan expresar las opiniones y demandas de manera adecuada.