LONDRES.- La primera ministra británica, Theresa May, despidió a su ministro de Defensa el miércoles debido a una filtración en el Consejo de Seguridad Nacional sobre la compañía de telecomunicaciones china Huawei, convirtiéndolo en el último de sus aliados que es expulsado del gobierno.
El repentino despido de Gavin Williamson, quien «enérgicamente» negó su participación en la filtración, fue otro golpe para May, cuyo cargo como primera ministra pende de un hilo después de su fracaso hasta ahora para sacar a Gran Bretaña de la Unión Europea.
El despido también subrayó la seriedad con que su equipo trató la filtración del Consejo de Seguridad Nacional, que analiza la estrategia de seguridad nacional, coordinación de inteligencia y defensa de Gran Bretaña, e involucra solo a ciertos ministros de su gabinete para mantener sus conversaciones lo más secretas posible.
El secreto se rompió el mes pasado cuando el periódico Telegraph informó que Gran Bretaña le permitiría a Huawei un papel en la construcción de partes de su red 5G, lo que puso a Londres en desacuerdo con Washington en la próxima generación de tecnología de comunicaciones. Las fuentes se vieron obligadas a decir que el papel sería limitado.
En una carta a Williamson, May escribió que una investigación sobre las filtraciones había proporcionado «evidencia convincente que sugiere su responsabilidad por la divulgación no autorizada». «No se ha identificado ninguna otra versión creíble de los eventos que expliquen esta filtración», agregó después de enviar la «información más reciente de la investigación» a Williamson el miércoles.
Williamson, quien ascendió rápidamente en las filas del Partido Conservador gobernante después de respaldar a May para convertirse en primera ministra en 2016, negó la responsabilidad. “Lamento que sienta que las recientes filtraciones del Consejo de Seguridad Nacional se originaron en mi departamento. Creo enfáticamente que este no fue el caso», sostuvo. «Niego enérgicamente haber estado involucrado de alguna manera en esta filtración y confío en que una investigación exhaustiva y formal hubiera reivindicado mi posición», continuó.
May nombró a la ministra de Desarrollo Internacional, Penny Mordaunt, para suceder a Williamson, y nombró al ministro de Prisiones Rory Stewart para ocupar el cargo anterior de Mordaunt. Ella será la primera mujer ministra de Defensa de Gran Bretaña.
May ha supervisado varias salidas en su gabinete, con muchas renuncias en lugar de despidos. Una notable excepción fue Boris Johnson, ahora uno de sus rivales más fuertes, quien renunció el año pasado en protesta por sus planes de mantener lazos comerciales estrechos con la Unión Europea después de que Gran Bretaña abandone el bloque, lo que provocó una rebelión en las filas de su partido.