MADRID.- Este jueves arrancó la segunda jornada de la moción de censura en España promovida por el partido de ultraderecha Vox, contra el Gobierno de coalición.
Tras la intervención y las réplicas de los grupos parlamentarios Unidas Podemos, Vox, Partido Popular y PSOE, se procederá a la votación. Sin embargo, ya desde ayer todo apunta a que la quinta moción de censura desde la restitución de la democracia en el país ibérico será la que menos apoyos logró en la historia.
Concluida la sesión plenaria de la jornada, marcada por un debate de casi 12 horas de duración, la moción de censura que pretende instalar en la jefatura del Gobierno a Santiago Abascal, líder de Vox, se reanudó en el Congreso de los Diputados a las 09:00 horas de este jueves.
Pablo Casado, líder del Partido Popular, desveló esta mañana que su partido votará “No” a la moción presentada por Vox.
En una dura alocución, el presidente del PP advirtió a Santiago Abascal que nunca hasta ahora ha contestado a sus provocaciones por respeto a sus votantes pero: “Hasta aquí hemos llegado”, para acto seguido presentarse como la única alternativa verdadera al Gobierno socialista de Pedro Sánchez.
Casado consideró que Abascal quedó al descubierto y presentó una moción “contra el partido que le ha dado trabajo 15 años”. “Lamento decirle que el tiro le ha salido por la culata pero acepto el órdago, es la hora de poner las cartas boca arriba. Hasta aquí hemos llegado”, advirtió el líder del PP.
Por su parte, el vicepresidente español, Pablo Iglesias, aseguró que “el PP y Cs dieron oxígeno al monstruo (Vox) y ahora se los está devorando”.
Iglesias le ha reprochado a Casado: “Pablo, eres consciente de que el comportamiento faltón de tu bancada te hace muchísimo daño. Señor Casado, este camino no tiene fin. Ustedes no son una derecha cobarde. Pero, por muy duros y faltones que sean los diputados del PP, no ganarán la batalla ideológica a Vox. Sabe que está atrapado. Por eso usted y la señora Arrimadas están perdidos”.
Todo apunta a que la moción promovida por Vox obtendrá la menor cantidad de votos registraos desde la recuperación del sistema parlamentario en 1977. El tono bronco y las duras acusaciones vertidas durante el primer día no auguran un respaldo en los partidos opositores ni, por supuesto, en los que integran la coalición gobernante.