MANAGUA.- El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos aseguró este miércoles que no se encontró indicios de que las protestas contra el Gobierno sandinista sea un intento de golpe de Estado como denuncia el presidente, Daniel Ortega.
Ortega acusó públicamente al organismo internacional de ser “un instrumento de la política de la muerte, del terror y la mentira”. Ante sus simpatizantes, el presidente calificó de “ciegos” a los delegados de la organización.
Entre las violaciones a los derechos humanos que han sido documentados desde el 18 de abril por la ONU, están el “uso desproporcionado de las fuerzas por parte de la policía, que se tradujo en varias ejecuciones extrajudiciales”, o bien “desapariciones forzadas”, así como “detenciones ilegales y arbitrarias”
Entre esas detenciones se cuenta el coronel retirado Carlos Brenes Sánchez, que en mayo leyó una proclama demandando, en nombre de varios exoficiales del Ejército Popular Sandinista, la salida del poder de Ortega. Brenes fue presentado ante un juez a mediados de esta semana con cargos de terrorismo, secuestro y daños a la propiedad.