VATICANO.- El presidente de Rusia, Vladimir Putin, viajó a Italia para una ronda de encuentros con las principales figuras políticas del país y entre ellas está el Papa Francisco, quien lo recibió en el Vaticano para intercambiar ideas.

Luego de la reunión, durante un almuerzo con el primer ministro, Giuseppe Conte, el mandatario ruso se animó a afirmar que su país y la Santa Sede tienen raíces en común.

El motivo de esta declaración radica en que el pontífice de contó que entre sus libros de cabecera están los clásicos rusos, de León Tolstói y Fiodor Dostoievski, y que incluso re conoció que cada sacerdote le recomienda leer las obras de estos sujetos.

«Sin los libros de Dostoevski, sin tomar conciencia de toda la profundidad de su filosofía, no se puede ser un verdadero cura«, citó Putin al Papa, quien le autorizó poder hacer públicos estos secretos.

Previo a la llegada del ruso, la autoridad eclesiástica se comunicó con las 14 familias de los marineros muertos el día lunes en un sumergible de la Marina, el cual se incendió e intoxicó a la tripulación hasta dejarlos sin vida.