MUNDO.— El mundo registró el récord de 120 millones de personas desplazadas a la fuerza a finales de abril de 2024, advirtió el jueves la ONU, una cifra que no deja de aumentar debido a las guerras, la violencia y las persecuciones.
Los desplazamientos forzados en el mundo aumentaron por 12º año consecutivo a raíz de los conflictos en Gaza, Sudán y Birmania, indicó la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en su informe anual.
«La guerra sigue siendo el motor de los desplazamientos masivos», explicó el jefe de ACNUR, Filippo Grandi, en una rueda de prensa en Ginebra.
El crecimiento de esta estadística es acelerado: apenas unos meses antes, a finales de 2023, el número de desplazados se situaba en 117,3, una cifra que ya superaba en diez millones la de 2022.
En el mundo hay casi el triple de personas desplazadas que en 2012 y la cifra actual equivale a la población de Japón, advirtió el informe.
ACNUR señala que 23 millones de estas personas se encuentran en América, donde se producen «movimientos mixtos de personas refugiadas y migrantes sin precedentes en la región, a menudo a lo largo de rutas mortalmente peligrosas».
Sin embargo, la agencia destaca los avances en este continente en la adopción de «soluciones para garantizar la protección, la regularización y la integración de las personas en situación de desplazamiento».
El informe menciona los casos de Brasil, Colombia, Perú y Ecuador que «están llevando a cabo vastos programas de regularización para personas refugiadas y migrantes vulnerables, garantizando la documentación y el acceso a los servicios».
El director regional de ACNUR para las Américas, José Samaniego, celebró la estrategia adoptada en muchos países «para abordar las causas profundas del desplazamiento en los países de origen, para responder a las necesidades humanitarias y de protección de las personas en tránsito, y fortalecer la protección, la inclusión y las soluciones en los países de destino y de retorno».
Los datos de este informe muestran que el número de venezolanos desplazados al extranjero aumentó en 2023 de 5,4 millones a 6,1 millones de personas, en su gran mayoría en otros países latinoamericanos como Colombia, que acoge a 2,9 millones.
Este repunte sitúa a Venezuela como el tercer país con mayor número de personas desplazadas al extranjero en el mundo, por detrás de Afganistán y Siria y superando a Ucrania.
El aumento de crisis es palpable y el cambio climático impacta en el desplazamiento de las poblaciones y en los conflictos, según Filippo Grandi.
El año pasado, ACNUR declaró 43 situaciones de urgencia en 29 países, es decir, cuatro veces más de lo que era habitual hace unos años, insistió el responsable.
Grandi atribuyó este aumento a «la manera en que se llevan a cabo los conflictos, con un desprecio total» al derecho internacional y «a menudo con el objetivo concreto de aterrorizar a la población».
Y «a menos que haya un cambio en la geopolítica internacional, desgraciadamente, preveo que esta cifra continúe aumentando», agregó.
Del total a finales de 2023, 68,3 millones de personas fueron desplazadas dentro de su propio país, señala el informe.
El número de refugiados y personas que necesitan protección internacional también creció a 43,4 millones, según ACNUR.
En su informe, la agencia intenta nuevamente desmentir la percepción falsa de que los refugiados y otros migrantes se dirigen casi siempre a países ricos.
«La gran mayoría de refugiados son acogidos en países vecinos, con un 75% residiendo en países de ingresos bajos o medios», señala el reporte.
Gran parte del aumento de desplazados forzosos en el mundo se debe a la guerra civil en curso en Sudán desde abril de 2023, que provocó la huida de más de nueve millones de personas.
Los combates en República Democrática del Congo y Birmania también dejaron millones de nuevos desplazados durante el último año.
Y en la Franja de Gaza, la ONU estima que unos 1,7 millones de personas (un 75% de la población) fueron desplazadas por la guerra entre Israel y el movimiento islamista Hamás. Siria se mantiene como la mayor crisis del mundo en este sentido, con 13,8 millones de personas desplazadas forzosamente dentro o fuera del país, señaló ACNUR.