TEL AVIV.— El Tribunal Supremo de Israel ha invalidado una ley fundamental propuesta por el Gobierno de Benjamín Netanyahu, marcando un hito al revocar, por primera vez en la historia del país, una enmienda que eliminaba el principio de razonabilidad y restringía el control del Tribunal sobre las decisiones del Ejecutivo, según informó Kan.
La decisión de anular esta ley, que fue la primera aprobada como parte de las reformas judiciales del Gobierno a mediados de 2023, fue tomada por una mayoría de 8 de los 15 jueces del Tribunal Supremo, según lo reportado por la emisora de radio.
El ministro de Justicia israelí, Yariv Levin, criticó al Tribunal Supremo por lo que él llamó «apropiarse de todos los poderes» tras la anulación por parte de los jueces de un componente clave de las controvertidas reformas legales del Gobierno. Levin expresó su descontento en su canal de Telegram, afirmando que «los jueces toman en sus manos todos los poderes, que en un régimen democrático se distribuyen equitativamente entre los tres poderes» del Estado.
En septiembre, el Tribunal Supremo de Israel llevó a cabo varias audiencias sobre leyes recientemente aprobadas en el marco de la polémica reforma judicial del Gobierno, la cual ha desencadenado protestas generalizadas en todo el país desde principios de año.
El Gobierno israelí sostiene que la reforma judicial busca equilibrar los tres poderes del Estado, dado que el Tribunal Supremo tiene la autoridad para invalidar leyes y decisiones del poder ejecutivo y legislativo en ciertas circunstancias.
Los partidarios de la reforma argumentan que es necesaria para permitir que un Gobierno democráticamente electo implemente políticas que beneficien a la mayoría de los ciudadanos.
Por otro lado, los opositores consideran que la reforma es un intento del Gobierno de Netanyahu para socavar el orden democrático del país y privar al Tribunal Supremo de la capacidad de controlar al Ejecutivo y al Legislativo en decisiones que puedan ser arbitrarias, radicales o corruptas.