PARÍS.- La capital francesa sufre una ola de inseguridad insostenible, según lo expresado por ciudadanos en varios medios franceses. Uno de los barrios mas afectados es el de Val-d’Oise, donde en el día de ayer una pareja homosexual fue atacada, a golpes y tironeos, por un grupo de musulmanes en la vía pública, según pudo obtener el portal de noticias español «La Gaceta». Posteriormente una pandilla de siete menores de edad fue capturada en la estación de Conflans-Sainte-Honorine, informó el parisino «Le Figaro».
Varios choferes de transporte publico anunciaron su decisión de no detenerse en algunos barrios parisinos a causa del preocupante nivel de delincuencia y consumo de drogas que presentan: “No son zonas seguras para los profesionales y tampoco para los viajeros”, expresaron.
Conductores de la Régie Autonome des Transports Parisiens (RATP), la compañía de transporte público de la capital francesa, se sumaron a la denuncia de sus colegas y agregaron que la presencia de bandas raciales significan también una amenaza para quienes transitan estas zonas.
Según los maquinistas, el numero de episodios violentos se triplicó en las ultimas semanas. Además comentaron que, a pesar de que parezca una situación sin remedio, acudieron a la policía local para encontrar una solución que mengue los conflictos.
Otras zonas alarmantes son las estaciones de Marcadet Poissonnier y Porte de la Chapelle. Hace unos años, esta última acogió involuntariamente a centenas de refugiados que no tenían lugar donde vivir, quienes instalaron sus carpas en las calles y al ser desalojados generaron diversos incidentes, en su mayoría de gravedad.
¿Cómo acciona el gobierno? Actualmente el ministro del Interior, Gerarl Collomb, junto con la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, están estudiando un plan de acción que cese la violencia, pero por el momento no pusieron en marcha ningún tipo de medida preventiva.