WASHINGTON.— Tesla, el fabricante estadounidense de vehículos eléctricos, sorprendió negativamente a las expectativas del mercado y analistas con sus resultados del cuarto trimestre de 2023, al registrar ganancias operativas un 40% inferiores respecto al mismo periodo del año anterior, según un informe de la propia empresa.
A pesar de reportar ganancias por aproximadamente 7.900 millones de dólares, este monto se benefició de una provisión única no monetaria de 5.900 millones de dólares vinculada a activos fiscales diferidos. Excluyendo este impulso, las ganancias reales de Tesla fueron de unos 2.500 millones de dólares, casi un 40% menos que en el cuarto trimestre de 2022, incumpliendo las estimaciones de Wall Street.
Medios especializados en economía y finanzas, como Bloomberg, estiman que las acciones de Tesla han experimentado una disminución de hasta un 16% de su valor desde el inicio de 2024. Esta caída se atribuye a la preocupación de los inversores ante la escasa demanda de vehículos eléctricos, el exceso de oferta en este mercado y los costos elevados.
En un comunicado emitido el 24 de enero, la compañía reconoció que, en 2024, su tasa de crecimiento en el volumen de vehículos podría ser significativamente inferior a la alcanzada en 2023, ya que los equipos trabajan en el lanzamiento de la próxima generación de vehículos en la gigafábrica de Texas.
Además de la disminución en las ganancias operativas, Tesla advirtió que el ritmo de ventas podría ser «notablemente inferior» este año. A pesar de ello, Elon Musk se mantiene optimista y ha reafirmado sus planes de construir grandes plantas de Tesla en México y en una ubicación fuera de América del Norte.
En cuanto a los ingresos de Tesla en el cuarto trimestre, estos ascendieron a 25.200 millones de dólares, un 3% más que el año anterior, impulsados por un aumento del 20% en las entregas de automóviles. Sin embargo, estos números no se tradujeron en un crecimiento de las ganancias.
En el cuarto trimestre de 2023, la empresa perdió por primera vez el liderazgo mundial de ventas de vehículos eléctricos frente al fabricante chino BYD. Aunque las entregas de Tesla aumentaron un 38% en 2023 en comparación con el año anterior, este crecimiento fue inferior al 50% que la empresa buscaba, ya que ha estado reduciendo los precios durante más de un año para impulsar las ventas en medio de una mayor competencia en el mercado de vehículos eléctricos.