WASHINGTON.- El presidente estadounidense Donald Trump firmó una orden ejecutiva que pone fin a la separación de los menores de sus padres, pero dice que la política de prosecución de «tolerancia cero» continuará.
La orden fue redactada por el secretario de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, en un esfuerzo por poner fin a lo que se ha convertido en una gran crisis para la administración Trump. «Vamos a tener fronteras muy fuertes, pero vamos a mantener unidas a las familias», dijo el presidente, agregando que no le gusta ver a los niños separados de sus familias. Sin embargo, también dijo que la política de «tolerancia cero» sobre la inmigración ilegal continuará.
La orden marca una partida dramática para una administración que ha estado insistiendo, erróneamente, en que no tiene más remedio que separar a las familias detenidas en la frontera a causa de la ley y una decisión judicial. Nielsen, el presidente y otros funcionarios han dicho en repetidas ocasiones que la única manera de poner fin a esta práctica es que el Congreso apruebe nuevas leyes, aunque tanto los demócratas como algunos republicanos han dicho que el presidente podría revertirlo con una simple llamada telefónica.
Trump había twitteado el miércoles anterior que estaba «trabajando en algo». «Es culpa de los demócratas, no nos darán los votos necesarios para aprobar una buena legislación de inmigración. Quieren fronteras abiertas, lo que genera un crimen horrible. Los republicanos quieren seguridad».
El Senador Jeff Merkley dijo que la acción ejecutiva no necesariamente refleja una solución positiva. «Los detalles aún están por venir, pero la ‘solución’ de @realDonaldTrump para la separación familiar suena como esposas para todos», sostuvo en una publicación en Twitter. «Encerrar a niños y familias en centros de detención es inaceptable y antiamericano».