KIEV.— Las expectativas en torno a la adquisición de aviones de combate F-16 de fabricación estadounidense por parte de Ucrania han quedado en suspenso, ya que su llegada, programada inicialmente para este otoño o invierno, no se materializará.
A pesar de las altas expectativas depositadas en estas aeronaves para reforzar la defensa aérea y la estrategia militar contra las fuerzas rusas, el portavoz del Mando de la Fuerza Aérea de Ucrania, Yuriy Ignat, comunicó que esta entrega no se llevará a cabo en el plazo previsto.
«Teníamos grandes expectativas sobre estos aviones, con la esperanza de que pudieran integrarse en nuestra defensa aérea y contribuir en la protección contra los misiles y drones rusos», señaló Ignat en una rueda de prensa local. A pesar de la demora en la llegada de las aeronaves, resaltó que la capacitación de los pilotos ucranianos para operar estos aviones está en marcha y avanzando.
Al mismo tiempo, Ignat subrayó la necesidad de fortalecer a las tropas ucranianas y reforzar sus capacidades de defensa aérea, dado el escenario actual en el que las Fuerzas Armadas rusas han contenido los avances del Ejército ucraniano. Esto ha generado inquietudes y críticas entre los principales aliados de Ucrania.
El ministro de Defensa ucraniano, Olexi Reznikov, previamente había expresado la importancia de adquirir aviones, en especial los F-16, capaces de realizar ataques terrestres cuando fuera necesario. No obstante, la decisión sobre el suministro de estas aeronaves por parte de Washington sigue pendiente, y el Gobierno de Zelenski ha sido instado a no utilizarlos fuera del territorio ucraniano.
Durante los últimos meses, Ucrania ha hecho hincapié ante sus aliados occidentales en la necesidad de fortalecer su defensa aérea, lo cual se considera posible mediante la incorporación de estos cazas. Sin embargo, la capacitación de los pilotos para esta tarea requerirá varios meses, según expertos.
Estados Unidos ha reiterado en múltiples ocasiones que el proceso de envío de estos aviones podría demorar meses debido, en gran parte, al tiempo necesario para formar a los pilotos encargados de operarlos. Además, se ha otorgado la autorización para que otros países, como Dinamarca y los Países Bajos, también contribuyan a la capacitación de pilotos ucranianos, aunque aún no se ha definido cuándo comenzarán estos entrenamientos.
El pasado 13 de agosto, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, advirtió que los planes de la Casa Blanca de proporcionar aviones F-16 a Ucrania representan una amenaza nuclear para su país.
Lavrov resaltó que se ha comunicado a las potencias nucleares como Estados Unidos, el Reino Unido y Francia, que Rusia no puede pasar por alto la capacidad de estos aviones para transportar armas nucleares.