WASHINGTON.— El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, habría permanecido en el hospital durante un período más prolongado de lo inicialmente informado, y la situación se habría comunicado al presidente Joe Biden varios días después de su admisión.
De acuerdo con medios como AP, Reuters y The Guardian, que citan a funcionarios del Pentágono, se informa que el general Austin fue ingresado al hospital por primera vez el 22 de diciembre para someterse a un procedimiento médico. Sin embargo, tuvo que regresar el 1 de enero, esta vez a la unidad de cuidados intensivos, según los reportes.
El Departamento de Defensa ha admitido que Lloyd Austin fue hospitalizado a principios de enero y el funcionario ha expresado que asume la responsabilidad total de sus decisiones.
El presidente Biden enfrenta críticas por parte de miembros del Partido Republicano, incluido Donald Trump, debido a la presunta falta de transparencia del jefe del Pentágono, quien no notificó a tiempo su hospitalización ni siquiera a la Casa Blanca. Esto ha llevado a que opositores de la Administración Biden pidan sanciones contra el general, y Trump ha solicitado su dimisión.
Según ha informado el Pentágono, el secretario de Defensa fue ingresado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed debido a complicaciones derivadas de una intervención médica reciente y actualmente se encuentra en proceso de recuperación.
El Departamento de Defensa declaró el 8 de enero que el secretario de Defensa, Lloyd J. Austin III, sigue hospitalizado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, mostrando signos positivos de recuperación. Hasta el momento, no se ha establecido una fecha precisa para su alta médica.
Aunque no se conocen las razones por las que Austin no notificó a tiempo a Biden sobre su hospitalización, el presidente ha optado por respaldarlo. Un funcionario de la Casa Blanca mencionó a Reuters el 8 de enero que el mandatario no está contemplando la posibilidad de destituir al secretario.
Por su parte, el 6 de enero, Austin publicó un comunicado en el que expresa su satisfacción por su recuperación y su deseo de regresar pronto al Pentágono. Además, reconoce que podría haber comunicado mejor su hospitalización y asume la responsabilidad por ello.
«Comprendo la preocupación de los medios por la transparencia y reconozco que podría haber hecho un mejor trabajo para mantener al público informado adecuadamente. Me comprometo a mejorar», declaró.