La economía argentina se desploma sin freno

0
156
Pesos

BUENOS AIRES.-  Mientras los países de la región comienzan a dar indicios de recuperación económica luego de los vaivenes provocados por la pandemia del COVID-19, la Argentina se encamina hacia un corredor incierto y peligroso. 

El mandatario Alberto Fernández, a quien le llaman popularmente Marioneta Fernández, señalándolo como un político que sigue las órdenes de la vicepresidenta Cristina Fernández desde que ella misma lo nominó candidato a presidente, ha ejecutado la cuarentena más larga del mundo, nueve meses de decisiones improvisadas que derivaron en el cierre definitivo de cientos de miles de industrias y comercios, elevando el índice de pobreza a más del 50% de la población activa.

Al mismo tiempo se endureció el denominado cepo cambiario que no permite el acceso a la compra de divisas provocando que la moneda estadounidense cotice a más del doble en el mercado paralelo. 

La inflación está fuera de control y las impresoras de la Casa de la Moneda trabajan 24 horas al día con turnos de ocho horas sin dar abasto a la emisión de billetes sin respaldo alguno.

El Gobierno de los Fernández ha firmado contratos con España y Brasil para incrementar la capacidad de impresión de papel moneda, y las primeras partidas han arribado al país este miércoles, literalmente contenedores llenos de billetes. 

 La demanda por parte parte del Gobierno para hacer frente a los programas de ayuda en medio de la pandemia han excedido su capacidad.

Responsables de entidades crediticias consideran urgente la creación de un nuevo billete de 5.000 pesos, como mínimo, para aliviar la escasez de papel moneda. 

La falta de uno o dos billetes de mayor denominación a los de 1.000 pesos actuales genera una tensión entre el Central y los bancos por el manejo del efectivo, tanto por el costo de almacenaje y el transporte como por el abastecimiento de las piezas de dinero físico. 

El Banco Central y el presidente Fernández llevan meses contemplando la puesta en circulación de un billete de 5.000 pesos. No obstante, prefieren aplazarla de momento, para no suscitar sensaciones inflacionarias. Mientras tanto, el país paga en dólares por imprimir pesos. 

En el ámbito empresarial se teme que Argentina se convierta en la próxima Venezuela, dado el recorrido de un modelo que emula al de Nicolás Maduro, con quien los Fernández mantienen una afinidad que no esconden.

Sin embargo, el presidente ha logrado algunas victorias para el ámbito interno de su fuerza política, no en lo económico, sino en lo judicial,  desde la asunción a la presidencia hace un año se han liberado cientos de encarcelados por casos de corrupción, y se ejerce una fuerte presión sobre el poder judicial para intentar desactivar las múltiples acusaciones de corrupción contra la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, quien no ha sido detenida gracias a sus fueros. 

Por otro lado la oposición encabezada por Juntos por el Cambio vive una crisis interna luego de que el gobierno de Mauricio Macri no consiguiera resolver la intrincada economía que lleva décadas de descalabros.