LA PAZ.- La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, ratificó este miércoles a la mayor parte del alto mando militar del país, aunque cambió al principal jefe del Ejército, quien había tomado su cargo de forma transitoria el pasado 13 de noviembre.
La mandataria designó a Rubén Salvatierra Fuentes como comandante general del Ejército de Bolivia, en reemplazo de Iván Patricio Inchaustia, quien ocupó el cargo durante casi tres meses y raíz de la crisis política que estalló luego de las elecciones de octubre 2019.
Además, Áñez ratificó a otras cuatro autoridades dentro del Alto Mando Militar. Sergio Orellana Centellas fue designado como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y Pablo Guerra Camacho como jefe del Estado Mayor General de la institución castrense.
De igual forma confirmó a los jefes de la Fuerza Aérea Boliviana, Ciro Álvarez, y de la Armada, Moisés Mejía.
“La designación que hoy efectuamos responde a una atribución privativa de la Capitana General y se hizo en pleno respeto y observancia de la jerarquía militar”, aseguró Áñez en un breve acto realizado sin previo aviso al final de la tarde de este miércoles en el palacio de gobierno.
El alto mando militar había sido relevado totalmente el 13 de noviembre pasado, al día siguiente de la autoproclamación de Áñez como presidenta provisoria, tras la renuncia de Evo Morales.
El cambio a la cúpula militar se produjo después de que el ex presidente Morales asegurara hace menos de dos semanas desde Argentina, desde donde hace declaraciones incendiarias, que mantiene contacto con “militares patriotas”, que según sostiene cuestionando a expando y actuales jefes de las Fuerzas Armadas.
