TEL AVIVE.— El Presidente de Israel, Isaac Herzog, ha ordenado la detención de la controvertida reforma judicial propuesta por el Primer Ministro Benjamin Netanyahu.
La reforma judicial, que ha sido criticada por grupos de derechos humanos y la oposición política, buscaba otorgar más poderes al Ministerio de Justicia y limitar el papel de la Corte Suprema en la supervisión de las decisiones gubernamentales.
En su discurso, el Presidente Herzog declaró que «la independencia judicial es un pilar fundamental de la democracia y debe ser protegida a toda costa». Herzog también señaló que la reforma judicial podría socavar la confianza del público en el sistema judicial y el estado de derecho.
La orden de detener la reforma judicial ha sido bien recibida por grupos de la sociedad civil y la oposición política, que han expresado su preocupación por la erosión de la independencia judicial en Israel.
El jefe del sindicato nacional Histadrut, Arnon Bar-David, anunció la convocatoria de una huelga laboral «histórica» en un intento de «detener la locura» generada por la controvertida reforma judicial del Gobierno de Benjamin Netanyahu, informó la radio nacional israelí.
«Todos estamos preocupados por el destino de Israel», dijo Bar-David en una reunión con líderes empresariales y funcionarios públicos. «¡Juntos decimos basta!», subrayó.
«Hemos perdido el camino, no se trata de izquierda o derecha”,agregó el líder sindicalista. «Ya no podemos polarizar a la nación». Bar-David dijo también que en las últimas semanas ha hecho todo lo que ha podido para evitar esta situación, pero que sus esfuerzos fueron en vano.
El Primer Ministro Netanyahu, por su parte, ha criticado la decisión del Presidente Herzog, argumentando que la reforma judicial es necesaria para fortalecer el sistema legal del país y combatir la corrupción.
La orden del Presidente Herzog es un recordatorio de que en Israel, la independencia judicial y la defensa del estado de derecho son principios fundamentales que deben ser respetados y protegidos.
