LIMA.- Los magistrados de la Sala Penal Nacional encontraron culpable a Abimael Guzmán por los delitos de terrorismo y asesinato causados tras la detonación de un auto cargado con 400 kilos de explosivos en una zona capitalina de clase media en junio de 1992, donde además de dejar un saldo de 25 muertos hubo 155 heridos.
Esta es la segunda condena de por vida que recibe el rebelde. La primera fue emitida en 2006 por ordenar la muerte de 69 personas en la aldea andina Santiago de Lucanamarca en 1983.
Los otros nueve miembros de la cúpula, entre los que se encontraba la pareja sentimental de Guzmán, Elena Iparraguirre, también fueron condenados a perpetuidad. Todos apelaron la sentencia con la que culminó el proceso judicial que empezó hace cuatro años.
Guzmán, un exprofesor de filosofía de 83 años, está preso tras ser capturado en septiembre de 1992 cuando comenzó la caída del grupo terrorista que desató un baño de sangre en Perú desde que empezó la lucha armada para conquistar el poder a comienzos de los años 80.
Según analistas, en la actualidad, Sendero Luminoso cuenta con no más de 200 combatientes y su refugio es la principal zona productora de cocaína de Perú, el valle amazónico.
Perú vivió un conflicto armado interno que enfrentó de un lado a las fuerzas de seguridad y a los comités campesinos de autodefensa y del otro a Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. una comisión de la verdad calculó que la cifra de muertos podría haber alcanzado los 70.000.